Una escalada de protestas populares en Ecuador ha puesto en jaque en los últimos días al gobierno de Lucio Gutierrez. Las masivas movilizaciones, principalmente en Quito, capital del país, y en el estado de Pichincha exigen al grito de "¡Lucio fuera!" y "¡Que se vayan todos!" la renuncia del gobierno 'progresista' electo en noviembre de 2002.

La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), que fuera pilar del apoyo social a Gutierrez, desde mediados del 2004 pasó a la oposición al gobierno, acusándolo de desoir los histórcos reclamos populares y no cumplir las promesas que lo llevaron al poder.

Si bien un manejo descaradamente discrecional del sistema judicial sumaron a la oposición a un amplio arco de la población, el momento más crítico tuvo lugar a partir del anuncio oficial por cadena de radio y televsión del establecimiento del "estado de emergencia" el pasado viernes 15, algo muy similar a lo ocurrido en Argentina el 19 de diciembre de 2001, cuando el presidente De la Rúa anunciara el estado de sitio. Y como en aquella oportunidad, las protestas esta vez no cesaron, y el decreto -que suspendía casi todas las libertades púbicas- sólo logró agudizar el conflicto. Finalmente, asediado, Gutierrez dio marcha atrás con este decreto a 19 horas de haberlo firmado.

En el mensaje, Gutierrez anunció también la destitución de los jueces de la Corte Suprema con el sentido de conseguir la calma, y en el mismo sentido de acallar los reclamos, el sábado 16 -bajo la presión de las movilizaciones- el Congreso refrendó la destitución de la Corte que los mismos diputados habían puesto irregularmente en vigor en diciembre pasado. La lamada "Corte de facto" había exculpado al ex presidente Bucaram, que había sido destituido por el congreso en febrero de 1997 -a seis meses de haber asumido- por "incapacidad mental", y que enfrentaba numersas causas judiciales por casos de corrupción. La población no perdonó la exculpación de Bucaram, que configuraba la expresión de un pacto de impunidad.

Radio La Luna, emisora alternativa de la ciudad de Quito, ha cobrado singular relevancia en estos días, convirtiendose en altavoz de las demandas callejeras, e incitando a la movilización. Desde el Estado se ha intentado acallar la señal radiofónica, interfiriéndola con un fuerte pitido que prácticamente imposibilita oir la transmisón. Por otro lado, según señala la agencia Altercom, "Para sostener el argumento de «conmoción interna» o de cumplir «su obligación de mantener la seguridad nacional» el régimen organizó a un grupo de aproximadamente 50 personas, algunos empleados del Ministerio de Bienestar Social, quienes bajo el mando del Teniente Coronel Edy Sánchez, delegado del Presidente ante el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, llegaron a las inmediaciones de Radio la Luna, eje de las comvocatorias al levantamiento popular, en franca actitud de provocación y cargados de armas, gasolina y antorchas. Solamente la gran cantidad de manifestantes pacíficos pudo frenar las macabras intenciones".

Las protestas adquirieron formas novedosas. Del "cacerolazo" del miércoles, al "reventón" (de globos) del jueves, al "tablazo" del viernes, miles de personas han salido a las calles en las noches, a pie y en caravanas motorizadas, a protestar en forma pacífica y en un ambiente festivo: jóvenes, mujeres, familias enteras con ancianos/as y niños/as. En la noche de ayer, gran parte de la capital quedó a oscuras durante 15 minutos, en el marco de un apagón de protesta. La represión no se hizo esperar desde el pasado miércoles, y ha sido lanzada por fuerzas policiales a las multitudes que ocupan las calles.

Más información: Indymedia Ecuador + Fotos del conflicto + Más fotos de ANPE + Escuchá en vivo la cobertura desde Ecuador de Radio Aler + Informe del sábado 16 (Agencia Altercom) + Informe del domingo 17 (Agencia Altercom) + Los ecuatorianos vuelven a las calles exigiendo salida de Gutiérrez (Rebelion) + Ecuador: Resistencia a medidas dictatoriales (Alai-amlatina) + Gobierno en jaque (IPS)