El 27 de enero, asesinaron a Sandra Cabrera, fue encontrada con un disparo en la nuca y con signos de haber sido violada cerca de la terminal de colectivos de la ciudad de Rosario. Sandra, tenía 33 años, era una trabajadora sexual y Secretaria General de AMMAR (Asociación de Mujeres Meretrices Argentina-Rosario), junto con sus compañeras estaban denunciando desde el año pasado a policías corruptos que les pedían dinero para dejarlas trabajar.