El viernes 9 falleció mientras realizaba tareas de mantenimiento David Ramallo,
trabajador de de MONSA Línea 60, al ser aplastado por un vehículo que se
encontraba en reparación en la recién inaugurada cabecera del barrio porteño
de Barracas. Las pésimas condiciones laborales que presentan las nuevas
instalaciones ya habían sido denunciadas por los delegados, que señalan
la responsalidad en la muerte de Ramallo de la patronal del Grupo DOTA,
gerenciadora de la Línea 60, así como de los funcionarios de la Ciudad de
Buenos Aires que dieron su habilitación pocos días antes.
Al enterarse del hecho, la reacción de los directivos de DOTA
fue abandonar inmediatamente las instalaciones como ratas,
generando a partir de ese momento un nuevo lockout patronal, tal cual
realizara el año pasado, dejando a cientos de miles de usuarios de la
línea sin servicio. Tras cinco días, la patronal difundió una solicitada
en la que lejos de asumir sus responsabilidades, pretende acentuar la
persecución política y judicial contra delegados y trabajadores.
Respuesta
al grupo DOTA | por Delegados y trabajadores de la Línea 60
Artículos relacionados:
Línea
60: sin respuesta y con abandono empresario de las cabeceras | por
Trabajadores Línea 60
Solidaridad
con los compañeros trabajadores de Línea 60 | por SOEIA Capital
Línea
60: “Nunca hubo paro, acá hay un lockout patronal” | por Notas.org.ar
|