Argentina Centro de Medios Independientes (( i ))


Direccin remitente:
Direccin destinatario:
Asunto:
Cometario para introducir el correo:


http://argentina.indymedia.org/news/2017/08/911471.php Enviar comentarios por correo electrnico.

Raúl Zibechi: “Están a la vista los límites de la acción electoral”
Por Leonardo Rossi, La Tinta - Sunday, Aug. 27, 2017 at 1:26 PM

25 de agosto de 2017 | El periodista uruguayo habló del libro co-escrito con Decio Machado: ‘Cambiar el mundo desde arriba. Los límites del progresismo’.

Raúl Zibechi: “Es...
zibechi-cambiar-el-mundo-1desde-arriba-.jpg, image/jpeg, 648x364

Cambiar el mundo desde arriba. Los lmites del progresismo’ es el nuevo libro escrito por Decio Machado (Brasil-Ecuador) y Ral Zibechi (Uruguay), una lectura necesaria para pensar el campo popular de la regin, en tiempos donde el minuto a minuto electoral parece licuar las perspectivas crticas. De paso por Crdoba, invitado por el Colectivo de Investigacin ‘El llano en llamas’, Zibechi repas algunas observaciones del libro y otros anlisis de coyuntura.

“Con el progresismo hubo ms capitalismo”, plantea el colaborador de La Jornada, Brecha y La Vaca, entre otros medios del continente, y uno de los autores-activistas referente de las luchas de los movimientos antisistmicos. La frase no es mera provocacin, tiene un sentido profundo en torno a la construccin de historias de vida en grandes masas de la poblacin, con hondo alcance en el tipo de valores colectivos e individuales que este sistema configura y que pareci sorprender a ms de uno a partir de los resultados de las elecciones de 2015.

El libro, editado por Autonoma-Pi de los hechos, “es un intento de hacer balance del periodo progresista y por otro lado desarmar algunas ideas falsas”. “Sostengo que en Cuba hubo una revolucin, no s si en Bolivia o en Venezuela hubo revolucin Pudo haber revolucin que no haya tocado uno de elementos centrales del aparato estatal como las Fuerzas Armadas? Ah comparamos los debates y procesos que hubo en Cuba con los que hubo en Bolivia y Venezuela. Queda para m claro que no hubo proceso revolucionario”, seala el autor.

A eso agrega otro tem, “el famoso tema de la desigualdad”. “En el periodo progresista disminuy la pobreza, pero tambin disminuy con los gobiernos conservadores. Pero no disminuy la desigualdad, porque el extractivismo es una mquina de generar desigualdad. Entonces el trabajo busca poner en dilogo esos temas y mostrar que el progresismo tuvo cosas interesantes, como el empoderamiento de sectores populares, que es un efecto indirecto, pero que no todo lo que dice el progresismo de s mismo es como lo dice”. Y adems, resalta los “efectos negativos, como el consumismo o la dependencia de las polticas sociales del capital financiero, algo demostrado”. “Con un dinero del Estado por poltica social tengo una tarjeta con la que puedo comprar una moto o un plasma, eso es una expansin y profundizacin del capitalismo”.

El trabajo repasa, por ejemplo, el crecimiento del endeudamiento de los sectores populares en Brasil al tiempo que los bancos hicieron jugosos negocios durante el lulismo, como nunca antes. El trabajo se orienta a debatir dentro del propio campo popular y de las izquierdas acerca de los horizontes emancipatorios lejos de miradas posibilistas.


En esta lnea, Zibechi apunta sobre el escenario argentino: “Creo que estamos en un momento en el que la atencin a lo electoral en el campo popular ha mostrado los lmites. Tenemos unas PASO con resultados horribles, una presidencial con resultados horribles. Antes se hablaba de los lmites de la construccin territorial, creo que est a la vista y hay que hablar de los lmites de lo electoral”.


Frente a las urgencias que marcan los voceros del sistema de partidos, reacomodando nombres propios frente a cada eleccin, Zibechi deja un mensaje acerca de los caminos de emancipacin colectiva que, entiende, sern duraderos si surgen de abajo, sin tener base en la tutela del Estado ni poltica social alguna, por ms progresista que sea, en contextos donde “el modelo extractivo deja afuera a la mitad de la poblacin”. “Debemos insistir, promover y fortalecer las alianzas urbano-rurales, la recuperacin de tierras, la soberana alimentaria como camino hacia la autonoma”.

Apuntes del libro

Entre las lneas de trabajo, el texto intenta pasar a discutir a partir de las diversas experiencias revolucionarias del siglo XX, y qu tipo de subjetividad han promovido las izquierdas en el poder. Con una marcada crtica a la visin teleolgica del marxismo ortodoxo que confi ciegamente en la apropiacin de los medios de produccin controlados por Estados centralizados, sin cuestionar el productivismo irracional ni la persistencia de la monetizacin de la vida, el trabajo va pasando por textos surgidos al calor de la truncada sovietizacin rusa, los ricos debates de la revolucin cultural china y las reflexiones sobre los objetivos que debiera tener la economa en la incipiente Cuba revolucionaria de la dcada del sesenta. Cuestiones como el trabajo voluntario, la relacin campo-ciudad y la organizacin horizontal de la produccin van siendo revisadas con profundas crticas y valiosos rescates en torno a textos de Lenn, Mao y Guevara, entre otros.

El libro recuerda las revueltas frente al neoliberalismo que atravesaron el continente en la larga dcada del noventa, para luego centrarse en analizar los progresismos, y compararlos en perspectiva histrica y coyuntural. Observar que bajo los gobierno del PT la parte ms rica de Brasil concentra ms recursos que durante el neolierbalismo, que la Colombia derechista redujo ms la pobreza que la Revolucin Ciudadana de Ecuador en el mismo perodo o el sensible aumento de las muertes a manos de la polica en Argentina durante el kirchnerismo comparado con la dcada anterior son datos que se van entremezclando con anlisis de fondo acerca de los ‘lmites del progresismo’.

El eje central del trabajo pasa por revindicar el conflicto social nacido desde abajo como motor de las grandes transformaciones estructurales de la sociedad en contraposicin a las democracias electoralistas, que si bien han reducido la pobreza no han sacudido las estructuras profundas de la desigualdad en el continente: basta ver la situacin de vivienda, salud pblica y educacin en las diversas geografas. Asimismo no han alterado las fuerzas de seguridad ni los mecanismos de participacin y financiamiento de la poltica, aspectos clave en la construccin de otros horizontes emancipatorios.


Se ha construido consenso democrtico sobre la base un Estado (el mejor aliado del capital) que acto como dinamizador del capitalismo aliado a grandes bancos y empresas extractivistas, transfiriendo parte de la renta para potenciar la masa de consumidores, en tanto que el capital concentrado no slo no fue desarticulado sino que creci. En simultneo el conflicto social no dirigido por los gobiernos fue sistemticamente deslegitimado y los espacios de democracia directa relegados.


Sin dejar de reconocer logros de estos gobiernos, el libro apunta a mantener vivo el sentido crtico en el campo de los ‘abajos’ o de los ‘movimientos antisistmicos’ contra cierta intelectualidad que “olvida los protagonistas populares que hicieron posible el ciclo progresista y slo atienden al papel de los dirigentes que, en sintona con toda tradicin del pensamiento crtico, debemos considerar que juegan un papel secundario” (162). En Amrica Latina, plantean los autores, la contra-hegemona “significa poner en cuestin los componentes sustantivos de la modernidad: el predominio de la razn cientfica, el pensamiento ilustrado, el concepto de desarrollo y acumulacin, as como nuestra relacin de control y dominio de la naturaleza” (100).

Punteo de la coyuntura

Consultado sobre el actual escenario en la regin, especficamente sobre Colombia y Venezuela, Zibechi reflexiona: “En algunas zonas campesinas, las FARC era un principio de orden y freno al narco aliado a los paramilitares. Esta transicin fortalece el campo paramilitar. Veremos qu sucede. Pero la guerra contra los de abajo sigue, en forma de goteo, porque no cesa la muerte de dirigentes populares”. Mientras que en Venezuela observa “una puja muy fuerte de poder, donde el madurismo mantiene un apoyo electoral importante, pero tambin lo tiene la oposicin”. “Es una sociedad partida al medio, y eso hace que sea cuestin de tiempo que estalle en un conflicto”. Zibechi expresa su rotundo rechazo y llama a “impedir la injerencia de Estados Unidos y las empresas extranjeras” y aclara que “eso no implica apoyo al madurismo, que entiendo est derivando en un creciente militarismo, donde el ncleo del poder est en las Fuerzas Armadas, lo cual significa un problema”.

En torno a este escenario, dice: “sin dejar de poner la mirada en la realidad local y el anlisis de clase, hace falta prestar mucha ms atencin en el crecimiento exponencial de las tensiones internacionales. Hace diez aos no me hubiese imaginado la situacin actual de Siria hoy es tan loco pensar esa situacin en Venezuela donde Estados Unidos, Rusia y China tienen intereses? El escenario se est moviendo muy rpido, y nuestra capacidad de comprensin de la realidad internacional no se est moviendo tan rpido. Hago un llamado a pensar geopolticamente desde los movimientos”.

*Por Leonardo Rossi para La tinta. Foto: Colectivo Manifiesto.

agrega un comentario



Copyleft 2001-2018 Argentina Centro de Medios Independientes (( i )). Copyleft: Se permite la copia, distribucin y uso de los contenidos de Indymedia Argentina, siempre y cuando NO se utilice con fines comerciales, a no ser que se obtenga permiso expreso del autor y en todos los casos se reconozca la autora (poniendo como fuente https://argentina.indymedia.org ). Las opiniones o artculos vertidos por lxs visitantes o colaboradorxs en el sitio pueden no reflejar las ideas de Indymedia Argentina. Usamos software libre. sf-active v0.9.4 Descargo | Privacidad