La presidenta de la APDH nacional, Norma R�os, asegur� que desde un principio, el organismo sostuvo que la de Santiago Maldonado fue una desaparici�n forzada. La APDH se present� como querellante en la causa judicial tras presentar varios Habeas Corpus. A un mes de la �ltima vez que fue visto el joven en los territorios mapuches tras la incursi�n de Gendarmer�a, la dirigente afirm� que este caso �es un antecedente muy grave en un gobierno que viene pisoteando sistem�ticamente cantidad de derechos de todo el cuerpo social. Una desaparici�n forzada en este momento, en pleno gobierno constitucional es un paso muy serio para que sigan muchas m�s�.

Por Carina Toso � Fotos: APDH

Santiago Maldonado est� desaparecido desde el 1� de agosto. La �ltima vez que lo vieron se lo estaba llevando Gendarmer�a tras un operativo realizado en la comunidad mapuche Pu Lof ubicada en Cushamen, Chubut. La comunidad lucha por sus tierras y desde principio de a�o sostiene marchas y un acampe. Hasta all� hab�a llegado Santiago. Despu�s de esa tarde en que todo se volvi� caos, en que los gendarmes irrumpieron a los tiros (tiros con balas de gomas pero tambi�n de plomo) este joven de 28 a�os est� desaparecido. Los organismos de derechos humanos presentaron Habeas Corpus, su familia hizo la denuncia. El jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Naci�n, Pablo Nocetti, dijo que iban �a cazar a todos los mapuches�, despu�s sostuvo que no hab�a detenidos y que andaba por la zona de casualidad porque estaba de vacaciones en Bariloche. La ministra de Seguridad Patricia Bullrich asegur� que �no iba a tirar un gendarme por la ventana� y habl� de bandos: �Los que quieren encontrar a Santiago y los que no quieren encontrar a Santiago�, dijo en su fallido. Adolfo P�rez Esquivel le pidi� la renuncia, como muchos otros. Los grandes medios demonizan a Maldonado y a la protesta mapuche, los medios alternativos y los de la zona difunden como pueden las voces que se quieren acallar. Las redes sociales se llenan de placas oscuras que se preguntan d�nde est� Santiago y hace responsable de su desaparici�n al Estado. La Justicia no puede obviarlo m�s y le pone la car�tula de desaparici�n forzada de persona a la causa que investiga qu� pas�. El gobierno bonaerense sale a la caza de docentes que hablan de Santiago en las aulas. Ahora lo buscan en las morgues de Chile, pero no hay ning�n NN con las caracter�sticas de Santiago, as� lo dice la oficina chilena de Interpol que colabora con sus colegas argentinos. Pero Santiago no est�. Su familia no lo ve desde hace un mes. Este 1� de septiembre se cumple un mes de su desaparici�n. Habr� manifestaciones y marchas en todo el pa�s. Tambi�n en el exterior.

Junto a Norma R�os, presidenta nacional de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), analizamos los detalles del caso, el discurso del gobierno y el por qu� de la lucha mapuche en la Patagonia, lucha que la Asamblea viene acompa�ando hist�ricamente y conoce desde adentro.

� �Qu� importancia tiene que la justicia haya cambiado la car�tula de la causa� a desaparici�n forzada de persona?

� Norma R�os: Es muy importante. Desde la APDH Chubut como la APDH Nacional nos presentamos como querellantes en la causa y tristemente se confirm� que ten�amos raz�n porque el expediente, que est� bajo secreto de sumario, comienza con la denuncia que hace Julio Saquero, miembro de la mesa nacional de la APDH y vecino del lugar, en la que afirma que a Santiago se lo llev� Gendarmer�a. Julio estuvo ese 1� de agosto frente a los acontecimientos, sin poder entrar a la comunidad. Pero cuando se van los gendarmes, empieza a saber todos los detalles. A medida que trascurre ese d�a y todos se reagrupan despu�s de haber escapado de la intromisi�n de las fuerzas de seguridad hacia la monta�a, ven que falta Santiago o el Brujo, c�mo le dec�an porque hasta ese momento no ten�an muchos datos concretos sobre �l porque no era una persona que iba siempre a la comunidad, tanto es as� que en la primera denuncia figura con el apellido de la madre. Tanto la primera denuncia como la presentaci�n del primer Habeas Corpus por parte de la APDH se hacen el 2 de agosto, porque hasta esa ma�ana siguieron buscando a Santiago por todo el territorio y por los puestos de Gendarmer�a de la zona. Todo lo que pas� ese d�a en Pu Lof nosotros lo supimos desde el primer momento y por eso consideramos desde el principio que lo de Santiago fue desaparici�n forzada.

� El acompa�amiento a la lucha de los mapuches por parte de la APDH viene desde hace mucho tiempo, pero despu�s de esto, �C�mo fue viajar y volver a visitar la comunidad?

� N.R.: Cuando llego a Esquel me terminan de contar todos los detalles. Hacemos una reuni�n con las diferentes regionales de APDH de la zona y definimos un plan de trabajo. Est�bamos ante una situaci�n grave porque desde hace tiempo venimos haciendo marchas all� y por eso hab�a gente persiguiendo a compa�eros, intimidando con amenazas y advertencias. Para el Ministerio de Seguridad de Chubut, no solo los mapuches son terroristas sino que los miembros de la APDH tambi�n y as� nos califica. Todo esto pone en peligro a muchas personas de la Asamblea que est�n trabajando en esa zona. De todas formas se sigue adelante porque es la forma de informar y de acompa�ar. La regional de Chubut, con la de Esquel y la de El Bols�n tienen una relaci�n hist�rica con la comunidad. En enero ya estuvimos trabajando con ellos y se viene apoyando su lucha. De hecho visit� a Facundo Jones Huala en la c�rcel cuando estaba en medio de una huelga de hambre. Para poder ir a verlo tuve que pedir permiso al Ministerio de Seguridad de la Naci�n porque para ellos no es un preso com�n aunque no lo reconocen como un preso pol�tico. Para ellos es un mapuche terrorista, tal como vienen manejando su discurso que los grandes medios ayudan a instalar. Hay muchos datos que no circulan. Cuando nosotros decimos que el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Pablo Nocetti, estaba al frente del operativo es porque �l mismo lo reconoce en las radios del lugar aunque despu�s lo desmienta y diga que estaba justo paseando por Bariloche. �Es �l el que dice �los vamos a cazar a todos� en referencia a los mapuches. Cuando se da cuenta de lo que pasa y ya con la desaparici�n de Santiago, cambia esa versi�n pero qued� demostrado que el Ministerio de Patricia Bullrrich no desconoce lo que pas� y que seguramente sabe todo lo sucedido minuto a minuto y lo que pas� con Santiago. Ese d�a en Pu Lof hubo una acci�n del Estado donde realmente dudamos de su inocencia. �Hay algo que es cierto y es que ellos tiraron con pistolas 9 mil�metros y con balas de escopetas, tiraron a matar.

� �A favor de qui�nes se llevan adelante todos estos operativos?

� N.R.: En todo esto est� comprobado que actuaron y act�an servicios de inteligencias, en la detenci�n de Facundo, ante las protestas. Ac� hay que tener claro que existe la necesidad de crear un enemigo interno porque lo tienen atr�s a Benetton y a estos tipos que son due�os de casi toda la Patagonia. Los mapuches, que el 90 por ciento son nacidos en Argentina aunque el gobierno quiera que todos crean que son chilenos, quieren recuperar sus tierras, esas tierras por las que vienen los extranjeros. Muchos tienen ya sus escrituras pero hay un juicio que est� paralizado hace mucho tiempo. Todos sabemos c�mo a trav�s de los distintos gobiernos se fueron apropiando de ese territorio para entregarlo a empresas extranjeras. Por ejemplo, tenemos un conde ingl�s que llega en avioneta con sus amigos al sur, donde tiene 60 mil hect�reas para cazar siervos rojos, especie que trajeron desde no s� d�nde y que fueron los responsables de exterminar a los huemules.

-�C�mo fue el �ltimo rastrillaje y c�mo la APDH acompa�a en esos momentos a la comunidad?

� N.R.: Por la confianza que tenemos con la comunidad Pu Lof es que podemos entrar y participar de los rastrillajes. El primero fue a los pocos d�as de la desaparici�n de Santiago que es cuando se encuentran su gorro y su cuellera. En el segundo rastrillaje que fue el 16 de agosto, y en el que pude estar presente, eran casi 400 efectivos los que llegaron, muchos se quedaron en los autos y unos cien entraron al territorio. Ten�an armas largas, pistolas 9 mil�metros, la verdad no s� qu� esperaban encontrar. Ese d�a, a unos 150 metros de donde encontraron el gorro y la cuellera, encuentran un collar. Fue justo donde los mapuches se�alan que los gendarmes levantaron a Santiago, lo pusieron en un cami�n Unimog y lo trasladaron unos metros. Despu�s lo bajaron y lo pusieron en una camioneta de Gendarmer�a. Hicieron un trasbordo poni�ndose todos los gendarmes adelante para impedir que se vea. Ahora hasta ese Unimog niegan pero est� filmado porque en la puerta hab�a muchos medios y compa�eros filmando.

� �Qu� opin�s de c�mo est� manejando el caso el Gobierno nacional?

� N.R.: Para la gente no es lo mismo que aparezca un cad�ver y se haga un juicio, que hagan creer que hay un desaparecido, que no se sabe d�nde est�, cosa que se naturaliz� durante mucho tiempo en la Argentina. Hoy est�n utilizando pr�cticamente el mismo discurso de Videla y se enojan cuando se lo decimos a tal punto que se retiraron de la entrevista con las organizaciones de derechos humanos haci�ndose los ofendidos. Entre todas las barbaridades que dijo Bullrich en este contexto, nos lleg� a decir que ella no iba a tirar un gendarme por la ventana. Y nosotros le dijimos que hace m�s de 40 a�os que estamos pidiendo justicia por nuestros desaparecidos y nuestros muertos, jam�s se tom� venganza o se usaron medidas violentas. Entonces, pensar que nosotros pretend�amos alguna venganza contra un gendarme no tiene sentido. Lo que queremos es justicia.

� La ministra tambi�n revel� la identidad de un testigo protegido�

� N.R.: Eso fue una forma m�s de descalificar a los testigos. As� te encontr�s que el testigo no es un se�or c�mo Benetton, es otro muchacho joven y artesano del Bols�n. Para mucha gente, en esta Argentina pacata e hip�crita, eso tambi�n llega, se desestima al distinto. Lo mismo que pasa con Santiago, que lo primero que intentaron instalar es eso de and� a saber que estaba haciendo y que es un artesano con rastas, no dicen que es un ser humano desaparecido. La otra gran grieta que se instala con este discurso del Gobierno es diferenciar a los blancos de los mapuches, y a los mapuches buenos de los malos. Los buenos son los que se dedican a servir a los grandes se�ores o los gendarmes y los malos son estos que est�n peleando por su territorio. Ac� viene un paso importante: �Por qu� ellos pelean por ese territorio? La raz�n fundamental es que ellos no quieren trasladarse a vivir miserablemente a las villas de las grandes ciudades, a morirse de hambre, en manos del narcotr�fico o de la propia polic�a. Entonces buscan por todos los medios tener un lugar donde producir, donde vivir, humildemente pero en libertad. Hay que ver las intenciones reales de todo esto. No hay que olvidarse que el mes que viene se vence el plazo para sacar la ley 26160 que habla de la posesi�n de tierras por parte de comunidades ind�genas. No les importa tratarla porque todos tienen de alguna manera favores que pagar a alg�n amigo. As�, una parte de la legislaci�n va a quedar en el limbo que va a permitir tomar cualquier medida.

-�Cu�les ser�an los grandes negocios de los extranjeros que se quieren quedar con estas tierras?

� N.R.: De lo que se habla en la zona es que los proyectos que tiene Benetton, que es una gran multinacional que no se sabe cu�ntas cosas abarcas, tienen que ver con la miner�a a cielo abierto en esa zona. Tambi�n se habla de una papelera, por eso hace a�os est� arruinando todo el medioambiente del lugar plantando millones de pinos, que no son aut�ctonos y que perjudican los flujos de agua. El otro proyecto que hace tiempo que viene dando vuelta es el de un dep�sito de basura at�mica en el nacimiento del r�o Chubut.� Ese r�o cruza toda la provincia y le da vida no s�lo a las sierras sino tambi�n a las comunidades y a las mismas ciudades. Estamos hablando de un r�o con la pureza del agua de deshielo. Esto no es algo que empez� ahora, sino que hace mucho tiempo que se lucha por el territorio. Y se llega a estos enfrentamientos porque aparecen dirigentes j�venes como los Huala que se plantan ante estos negocios y reivindican el derecho a la tierra.

� El hecho de mostrar estas luchas como las de un enemigo que se quiere construir, �Se puede volver un accionar sistem�tico por parte del Gobierno?

� N.R.: Ese es el objetivo del discurso oficial, porque as� como estaba Santiago en la comunidad apoyando la lucha, la gente ya desde enero iba a dar una mano, paraba en el lugar, dejaba bolsas de comida, harina, cobijas, colchones. Por ejemplo, cuando a uno de los hermanos Huala le pegaron un tiro porque lo confundieron con Facundo, a pesar de que estaba sangrando y con la cara destruida, no lo quisieron atender ni en el Mait�n ni en El Bols�n y logran llevarlo hasta Bariloche protegido con una caravana de gente que lo acompa��. Hab�a como 500 personas cubri�ndolo para que no lo detengan. Con esta desaparici�n tratan de hacer lo mismo, de transformarla en otra cosa y buscando a otro culpable. Pero en toda la zona hay gente con la inquietud y pidiendo justicia para saber d�nde est� Santiago, por supuesto que no podemos esperar el apoyo de todos como pasa siempre. La actitud del Gobierno sigue siendo clara: intentar desviar la atenci�n. Sino como puede ser que era ya 7 de agosto y el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj, todav�a hablaba de un extrav�o. Nosotros afirmamos desde el principio que Santiago est� desaparecido y as� lo sostenemos.

� La causa est� bajo el secreto de sumario, pero �se sabe algo del celular de Santiago tras el testimonio del amigo que lo llam� y dice que escuchaba pasos cuando lo atendieron?

� N.R.: Hasta donde sabemos no se pidieron a�n datos a la empresa de telefon�a pero quiz�s sea parte del secreto de sumario. Lo que s� fue evidente �y lo confirm� la fiscal, �es que se hizo un nuevo allanamiento en el destacamento de Gendarmer�a en el pueblo de San Mart�n, a 140 kil�metros de Esquel, donde se encontr� algo, que no sabemos que es, pero debe haber sido importante porque el jefe de la fuerza en esa zona fue relevado de su cargo y despu�s se cambi� de car�tula la causa. Supongo que ya se est�n sabiendo cosas para considerar seriamente que se trata de una desaparici�n forzada. A esto se suma el apoyo de todos los organismos de derechos humanos, nacionales e internacionales. Ya es una situaci�n que se les escap� totalmente de las manos.

-�Qu� significado tiene hoy que se abra una causa con esa car�tula, en medio de un gobierno democr�tico?

� N.R.: La causa tiene los elementos necesarios para ser una desaparici�n forzada: la detenci�n de una persona a manos de un aparato represor, del Estado o paraestatal, en una incursi�n en un territorio. Tambi�n vemos como se intenta sembrar el desconocimiento, el desv�o de la investigaci�n, el ocultamiento, todo eso hace al contexto de una desaparici�n forzada. Sabemos que es un antecedente muy grave en un gobierno que viene pisoteando sistem�ticamente cantidad de derechos de todo el cuerpo social. Una desaparici�n forzada en este momento, en pleno gobierno constitucional es un paso muy serio para que sigan muchas m�s. Adem�s es entrar en un t�nel muy oscuro, al cual no se le ve la salida. Cuando desaparecieron los 30 mil, no es que vino un plato volador y los abdujo a todos juntos, no fue una intervenci�n militar simult�nea en donde desparecieron todos. Empez� de a uno, despu�s dos, despu�s cinco. Fueron momentos en los que no se pudo o no se supo o no se hizo lo suficiente. Y ese es el gran desaf�o en la b�squeda de la verdad sobre Santiago Maldonado. No es solo la reivindicaci�n para su familia, para sus amigos, para la comunidad mapuche, para todos los que luchamos por los derechos humanos, sino que es una necesidad imperiosa para toda la sociedad. No puede haber otra desaparici�n forzada.