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Documento unificado a 6 años sin Luciano Arruga: la policía lo mató, el Estado lo desapare
Por Familiares y amigos de Luciano Arruga -
Thursday, Jan. 29, 2015 at 2:17 PM
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Adhesiones de
organizaciones a: adhesionesporluciano@gmail.com Contactos: 15 5646 6952
(Matías) - 15 6637 9076 (Rosaura) El 22 de septiembre de
2008, Luciano, siendo menor de edad, estuvo detenido ilegalmente en el
destacamento de Lomas del Mirador durante diez horas. Cuando Vanesa
Orieta (hermana) y Mónica Alegre (mamá) fueron a buscarlo, escucharon
cómo era golpeado. Ese episodio derivó en una causa por Torturas que
irá a juicio oral en marzo de 2015. El imputado es el oficial Julio
Diego Torales y se encuentra con prisión preventiva. Es innumerable la cantidad
de episodios de persecución y amenaza directa que sufrimos de parte de
policías, que no tuvieron ningún reparo en dejar en evidencia que
fueron ellos los que mataron a Luciano; se creen impunes. Cuando comenzó la
investigación, la primera medida que tomó la fiscal fue entregar la
causa a la policía que asesinó a Luciano. Por su manifiesta
complicidad, Roxana Castelli está acusada en un jury de enjuiciamiento
que presentamos los familiares y amigos. También están acusados la
segunda fiscal, Celia Cejas, y el primer juez, Gustavo Banco, por hacer
escuchas telefónicas secretas a toda la familia durante un año y medio.
En el marco del encubrimiento judicial, se instalaron en nuestras
casas, intervinieron nuestros teléfonos y quisieron disuadirnos de
sostener nuestra denuncia. Buscaban hacernos creer que se trataba de un
asunto de drogas, que se había ido con su padre o con una novia, que ya
iba a volver. Pero fue la policía y nosotros vamos a ir hasta el final. En esos primeros meses fue
estremecedor el silencio y el ninguneo oficial. La presidenta Cristina
Fernández y el gobierno nacional, a pesar de su hipócrita discurso
sobre los derechos humanos, jamás mencionó a Luciano Arruga ni a la
violencia estatal como sistemática. Se sostiene en la cúpula del poder
a personajes implicados en causas por violaciones a los derechos
humanos, algunas de lesa humanidad, como Milani y Berni. Berni, además,
en acuerdo con el SMATA, fue el encargado directo de la represión a los
“indomables” trabajadores de la fábrica Lear, que sostienen hasta hoy
una lucha histórica e inclaudicable por la reincorporación de todos y
por el fin de las patotas y la persecución sindical; los despedidos ya
fueron reinstalados por la Justicia y la empresa hoy se niega a acatar
el fallo: ¡Exigimos su cumplimiento inmediato! No quedan excluidas de
lo peor del sistema político que protege genocidas, mafiosos y
asesinos, las miles de mujeres desaparecidas a lo largo y ancho del
país víctimas de la trata de personas organizada por policías,
funcionarios judiciales y políticos. A los seis meses, la
familia Arruga se dirigió a la Casa de la Provincia por un llamado de
parte del equipo de Daniel Scioli, uno de los máximos responsables de
la desaparición de Luciano: nos iban a recibir. Una vez allá, se nos
informó que el gobernador no tenía agenda. En su lugar, fuimos
recibidos por Ricardo Casal y Carlos Stornelli, en ese entonces,
Ministros de Seguridad y Justicia de la provincia: ambos se rieron en
nuestras caras. Casal nos dijo que cualquier policía corrupto era
separado de la fuerza de inmediato y que lo de Luciano era mentira.
Representantes de asuntos internos calificaron la adulteración de
libros y la venta de alcohol y sustancias de la policía a los detenidos
como “errores frecuentes”. Luego, esos mismos funcionarios a los que
nosotros escrachábamos públicamente salieron demagógicamente en medios
de comunicación a afirmar que nos acompañaban y estaban al tanto de los
avances de la causa. No podemos omitir que el
gobernador que se negó a hacer declaraciones sobre su ineludible
responsabilidad política en esta causa es uno de los candidatos más
sólidos del kirchnerismo para acceder a la presidencia. Vivimos en una
provincia en la que no funcionan los hospitales, no hay centros
culturales, la educación está en quiebra y a los trabajadores no les
alcanza para cubrir sus necesidades básicas pero se defiende la mano
dura, se encubre a la Bonaerense y se invierten millones en políticas
represivas que van en contra de los sectores más castigados. La
decisión de Scioli de militarizar todos los barrios está de manifiesto
cuando, mancomunado con el intendente Espinoza, invierte parte de su
presupuesto en la creación de una escuela de policía en la Universidad
pública de La Matanza. Este hecho viene siendo denunciado hace años por
las organizaciones de izquierda y de derechos humanos de la zona. El
aumento del presupuesto en supuestas políticas de seguridad que
incrementan los niveles de represión en los barrios y alimentan al
crimen organizado es de 1096%. Una de las “inversiones” con más
repercusión fue la salida a la calle de 10 mil nuevos policías y la
preparación, para 2015, según informes oficiales, de otros 15 mil. Los medios masivos no se
quedan atrás en el encubrimiento manifiesto de los crímenes de Estado.
Mientras las playas pintadas de naranja siguen siendo noticia nacional,
los asesinatos y desapariciones a manos de las Fuerzas de Seguridad
parecen no importar una vez que se termina la posibilidad de lucrar con
la muerte de jóvenes como Luciano. Los casos se presentan como
aislados, inéditos y sin responsabilidades intelectuales, y esa
parcialidad perversa responde directamente a las necesidades de un
gobierno que debe sostener e incrementar sus políticas represivas a
costa de mentiras, silencio y terror. Es clarísima la diferencia que
encontramos con los medios comunitarios, alternativos y populares, que
nos acompañaron desde el comienzo de esta lucha y pusieron a
disposición todos sus espacios para familiares, amigos y organizaciones. El hallazgo del cuerpo de
Luciano puso de manifiesto un entramado de encubrimiento de todas las
instituciones del Estado, que garantizaron mantenerlo desaparecido
durante casi seis años. Nos encontramos con que se explicaba su muerte
a partir de un simple accidente de tránsito. Sin embargo, todo lo
investigado a partir de la aparición involucra directamente a la
policía bonaerense en el asesinato de Luciano. A LUCIANO LO
MATÁ LA POLICÍA, LO DESAPARECIÓ EL ESTADO - JUICIO Y
CASTIGO A LOS RESPONSABLES POLÍTICOS Y MATERIALES. - BASTA DE
DESAPARECIDOS EN DEMOCRACIA -
BASTA DE GATILLO FÁCIL Y REPRESIÓN INSTITUCIONAL - BASTA DE
REMPRIMIR, CRIMINALIZAR Y JUDICIALIZAR LA PROTESTA SOCIAL. ABSOLUCIÓN
DE LOS MÁS DE 7000 PROCESADOS POR LUCHAR. - FUERA LA
ESCUELA DE POLICÍA DE LA UNIVERSIDAD DE LA MATANZA - ABSOLUCIÓN
A LOS PETROLEROS DE LAS HERAS -
NO A LA LEY ANTITERRORISTA Y EL PROYECTO X -
FUERA BERNI. FUERA MILANI - FUERA LA
POLICÍA DE NUESTROS BARRIOS - LUCIANO
ARRUGA PRESENTE, AHORA Y SIEMPRE. Convocan y adhieren:
Se cumplen seis años del secuestro, asesinato y desaparición de Luciano
Nahuel Arruga por parte de la policía y el Estado. Sus familiares,
amigos, organizaciones y partidos de izquierda, organismos de derechos
humanos independientes y medios alternativos lo buscamos
incansablemente. Fueron cinco años y ocho meses de amenazas,
hostigamiento, e intentos de amedrentarnos para que declináramos
nuestra denuncia contra la Bonaerense y el gobierno que la sostiene.
Luciano fue secuestrado el 31 de enero de 2009 y desde el comienzo
supimos que fue la policía. Lo supimos y lo sabemos porque lo tenían de
punto: lo detenían ilegalmente, lo humillaban, le apuntaban al pecho y
le advertían que tenía los días contados. Luciano comenzó, con 16 años,
a vivir con miedo a la policía, porque en cada oportunidad que se la
cruzaba le pegaban, lo verdugueaban, lo amenazaban o directamente lo
llevaban detenido sin ninguna justificación y lo torturaban.
Cuando comenzamos la búsqueda comprendimos que estábamos yendo contra
un sistema asesino de pibes y que no había democracia que protegiera a
quienes luchábamos por estas causas: comenzaron a seguirnos en nuestros
barrios, recibimos llamadas telefónicas amenazadoras, compañeros
nuestros y testigos de la causa fueron detenidos y torturados en
comisarías. Les repetían una frase: “dejate de joder con ese negro de
mierda”. Mario –hermano menor de Luciano- fue increpado por policías no
identificados que circulaban en un auto sin patente. Incluso intentaron
prender fuego la casa de Mónica Alegre y detuvieron a otros pibes del
barrio para hacerlos formar parte de sus negociados clandestinos bajo
una sola advertencia: “vas a terminar como Luciano Arruga".
Testigos afirman haber visto a Luciano en el Destacamento y hay móviles
policiales que la noche del 31 de enero de 2009 se salieron de su
jurisdicción para detenerse durante dos horas en el Monte Dorrego, un
descampado de la zona. De los 17 móviles de las comisarías de Lomas del
Mirador, sólo seis emitieron su posicionamiento aquella noche y uno
apagó su registro de radio desde las dos a las cuatro de la mañana:
Luciano fue asesinado a las tres y media. Los libros de entrada y
salida de detenidos del destacamento de Lomas del Mirador fueron
adulterados con tachaduras, borraduras e incluso hojas arrancadas.
Por todos los hechos de impunidad sucedidos con Luciano y con otros
tantos pibes del barrio, una de las primeras reivindicaciones que
sostuvimos fue el cierre definitivo del destacamento de Lomas del
Mirador. A los tres años lo conseguimos, pero tuvimos que pasar otros
tres años más para lograr la cesión definitiva del lugar a familiares y
amigos de Luciano. A pocos días de la aparición del cuerpo, el senado
de la Provincia otorgó la media sanción que faltaba para convertir en
ley nuestra consigna: tenemos Espacio para la Memoria Luciano Arruga
independiente del Estado y del gobierno.
Pudimos ver cómo, antes de pericias fundamentales, que por llegar tarde
no arrojaron resultados contundentes, blanqueaban con lavandina las
paredes del destacamento e incluso cambiaban el tapizado de los
móviles. Pudimos ver cómo se prendía fuego la comisaría 8º por un
supuesto “motín” en el que murieron cinco presos por estar hacinados
más de quince en una celda para nueve.
La represión está diseminada en todas las provincias y es ejecutada
tanto por policías provinciales como por fuerzas nacionales, como la
Federal, la Prefectura o la Gendarmería, con presencia estratégica en
barrios pobres. Todos los funcionarios con los que nos reunimos en
estos años de lucha hicieron promesas que jamás cumplieron y nos
dijeron mentiras para no volver a recibirnos más. Cada uno de ellos fue
mencionado y denunciado públicamente por nosotros con nombre y apellido.
Ricardo Casal es el mismo impresentable que luego de la aparición de
Luciano tuvo la inmunda y repudiable caradurez de afirmar en medios de
comunicación que, finalmente, “su muerte fue un caso hospitalario”. Lo
mismo hizo Jorge Telerman, vocero del gobierno de la Provincia, cuando
emitió un comunicado en el que expresaba: “lamentamos los hechos
ocurridos con Luciano Arruga en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”,
mintiendo e intentando asquerosa, cínica e inútilmente lavarle las
manos a un gobernador que ya se manchó con sangre y a una policía que
es una mafia organizada por el poder político.
A cinco años y ocho meses de lucha inclaudicable, de marchas,
escraches, acampes, festivales y de búsqueda desesperada, encontramos a
Luciano. En abril de 2014 tomamos la decisión de presentar un nuevo
hábeas corpus exigiendo la aparición con vida. Fue rechazado en primera
y segunda instancia, pero gracias a nuestras apelaciones llegó a la
Cámara Federal de Casación Penal en Comodoro Py y la sala IV le dio
curso. El juez Juan Pablo Salas, entonces, reabrió los archivos de la
Policía Científica de la noche del 31 de enero de 2009 y se utilizaron
las huellas de Luciano registradas por una detención anterior. Con esa
información, se encontró un NN enterrado en el cementerio de la
Chacarita cuyas huellas coincidían.
La causa que habla de accidente informa que Luciano se encontraba a las
tres y media de la mañana del 31 de enero de 2009 cruzando General Paz
por la vía rápida y no peatonal cuando fue embestido por un auto. Para
acceder a ese lugar hay que subir un terraplén empinado y saltar la
baranda del puente. El expediente por el supuesto accidente ahora forma
parte de la causa que sigue teniendo vigencia, caratulada como
“Desaparición forzada de persona”.
El joven que lo atropelló fue nuevamente llamado a declarar y su
testimonio es contundente: Luciano corría desesperado, parecía que
escapaba de alguien. Declaró, además, un motoquero que se detuvo en
aquel momento a ayudar a desviar el tránsito; señaló que en la
colectora de la General Paz, lado provincia, había un patrullero de la
Bonaerense detenido y con las luces apagadas. También pudo acreditarse
que la ropa que Luciano llevaba puesta no era suya y en el curso de esa
vergonzosa investigación se perdieron evidencias fundamentales para
determinar cómo llegó ahí, como sus prendas y zapatillas. Luego de la
intervención en el lugar de la Policía Federal, Luciano fue traslado
por el SAME al hospital Santojanni, donde fue operado y murió a las
ocho de la mañana. Mientras estaba ahí, Vanesa Orieta y Mónica Alegre
fueron a buscarlo dos veces: les dijeron que ningún NN coincidía con la
descripción que ellas aportaban y que no podían pasar a identificar a
nadie.
Es creciente e indetenible la organización independiente de las
familias contra la represión y el gatillo fácil: el caso de Franco
Casco en Rosario, a pocos días de la aparición de Luciano, reveló que
la lucha en la calle es el único motor para hacer justicia. Cristian
Farías fue asesinado en noviembre por la policía de Santiago del Estero
y la causa también habla de un accidente. En estos últimos años, el
gobierno ratificó su decisión política de sostener y acrecentar esta
represión con designaciones como la de Alejandro Granados en el
ministerio de Seguridad de la Provincia. La organización de las
familias contra los atropellos del Estado no es exclusiva de nuestro
país, en México se levantaron cientos de miles contra la impunidad por
las 43 desapariciones de los normalistas.
Las desapariciones forzadas se completan con la complicidad de morgues,
hospitales y cementerios. El caso de la inundación en La Plata en abril
de 2013 demuestra las irregularidades deliberadas que encubren tanto la
cantidad de víctimas de estas masacres como facilitan el entierro de
cuerpos que no se sabe de quiénes son. Estas prácticas remiten a las
desapariciones forzadas de la última dictadura, en las que uno de los
destinos de los jóvenes militantes eran las fosas comunes.
Nuestra denuncia no cambió. Por el contrario, se amplificó. Nunca
diremos que hay una cadena de errores o negligencia: es encubrimiento
manifiesto y cómplice de todas las instituciones del Estado para
garantizar que en democracia haya desaparecidos. Luciano Arruga fue
asesinado por la policía bonaerense y fue desaparecido por el Estado
argentino.
La teoría del accidente para encubrir la violencia estatal tampoco es
una novedad: más de doscientas causas de gatillo fácil se intentaron
dejar impunes con esa estrategia. El caso de Ezequiel Demonty revela
esta práctica: policías lo obligaron a tirarse al Riachuelo y luego
quisieron hacerle creer a su familia que él lo hizo porque quiso. La
policía obligó a Luciano a subir a General Paz y él corría desesperado.
El caso Arruga se ha convertido en un emblema de lucha contra la
represión policial, que se repite a lo largo y ancho de todo el país.
No es nuestra intención presentar su desaparición como un caso único o
aislado: desde el comienzo de nuestra lucha resaltamos que ya son más
de 4300 los pibes asesinados en democracia por fuerzas de seguridad;
más de la mitad, durante la década kirchnerista y hay 216 desaparecidos
en democracia.
Nuestra lucha continuará vigente mientras sigan existiendo otros
Lucianos, porque demostramos que es la única forma posible de hacer
Justicia. Sólo organizados en las calles pudimos hacer historia y
encontrarlo. Nos comprometimos desde el primer momento a sostener una
independencia total del Estado y sus gobiernos y sostenemos esa premisa
más firmes que nunca. La sangre de nuestros pibes no se negocia.
EXIGIMOS:
Familiares y amigos de Luciano Arruga - HIJOS Zona Oeste - HIJOS La
Plata - Hijos Mar del Plata En La Red Nacional - Familiares y amigxs de
víctimas de la represión policial (Neuquén) - APDH La Matanza - SUTEBA
La Matanza - Coordinadora Antirrepresiva del Oeste - CORREPI - Partido
Obrero - Asociación de Profesionales en Lucha (Apel) - PTS - Ceprodh -
Frente Popular Darío Santillán - MIR - La Poderosa - Libres del Sur -
Frente Popular Darío Santillán, Corriente Nacional - Patria Grande -
Agrupación Hombre Nuevo - MST (Movimiento Socialista de los
Trabajadores) Nueva Izquierda - Sembrando Rebeldías - Movimiento
Popular La Dignidad - Barrios de Pie - Movimiento SUR - Jóvenes de Pie
- MTVI (Movimiento Teresa Vive Independiente) - Red Zapatista de
Liberación - Centro de Participación Popular Mons. E. Angelelli -
Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia de Fcio. Varela - FM
La Barriada 98.9 - Centro de Estudiantes de Psicología de la
Universidad Nacional de Mar del Plata - MEPs (Movimiento de Estudiantes
de Psicología) - Grupo de Estudios sobre Sistema Penal y Derechos
Humanos (GESPyDH) Instituto de Investigaciones Gino Germani - Colectivo
El Túnel - Centro de Estudiantes de Ciencia y Tecnología Uiversidad
Nacional de Quilmes - PRML (Partido Revolucionario Marxista Leninista)
- Tendencia Universitaria Nacional 29 de MAYO (Vicepresidencia del
Centro de Estudiantes de Ciencias Sociales-UBA, Minoría del Consejo
Directivo de la Facultad de Ciencias Médicas-UBA, Secretaría General
del Centro de Estudiantes del Joaquín V. Gonzalez, Minoría del Consejo
Directivo de la Facultad de Psicología- Universidad Nacional de
Rosario) - Segunda Independencia - Movimiento Torre - Bloque Piquetero
Nacional - Anaracumbia Libres del Pueblo - Zainuco - Cooperativa de
trabajadores y trabajadoras Cae Babylon - El Zumbido - Bandera Negra -
Equipo de Educación Popular Pañuelos en Rebeldía - Espacio de
Emancipacion Sur - FM Fribuay - El Andamio - Centro de Estudiantes del
ISFDyT 46 - Corriente de Organizaciones de Base La Brecha - Juventud
radical de Lomas de Zamora - CROMAÑÓN: 10 AÑOS DESPUÉS - Encuentro de
Lucha por los Derechos Humanos - La Miguelito Pepe - Entre Todos UNLaM
- La Rotonda Cultural - Cooperativa de Trabajo para la Comunicación
Social (FM En Tránsito 93.9 y Revista Güarnin!)