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La Córdoba de Eurnekián
Por Ecos Córdoba - Monday, Jul. 03, 2017 at 12:10 PM

3 de julio de 2017 | Se inauguró el inicio de obras del “Distrito Las Artes”, la mega-inversión sobre el Ex – Batallón 141. Un gran negocio para ciudad devastada por inundaciones, desbordes cloacales y pérdida del control de espacios verdes.

La Córdoba de Eurnek...
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El miércoles pasado, cinco horas antes de empezar la marcha contra la modificación de la Ley de Bosques, se realizó la inauguración del inicio de obras del Distrito Las Artes, la megainversión del multimillonario Eduardo Eurnekián en la ciudad de Córdoba. Se trata del proyecto de urbanización en el predio del Ex – Batallón 141, considerado como el último pulmón verde de la capital. Estuvieron presentes el mismísimo empresario, junto con el intendente Ramón Mestre, y el titular de la agencia Córdoba Turismo, Julio Bañuelos, en representación de la provincia.

Según el holding de Eurnekián, Corporación América, el espacio del Distrito concentrará en un par de décadas, el 40% del desarrollo de la obra privada cordobesa. Un cálculo que desde ya no estaba presente ni siquiera en el Estudio de Impacto Ambiental.

Dentro de sus 22 hectáreas, se pretende urbanizar 446 mil metros cuadrados cubiertos, donde albergarían más de 13.000 personas -una ciudad entera-, con 3.500 viviendas, hotel de cinco estrellas, centro comercial, hipermercado, centro de salud, entre otros. La densidad demográfica de Distrito Las Artes será diez veces mayor al estándar de esa zona de la ciudad, si se calcula que el barrio vecino Rogelio Martínez cuenta con 1.300 habitantes en una superficie similar al predio.

El remate por las tierras del Ex – Batallón se llevó a cabo en el 2007, en el último tramo de José Manuel de la Sota en su segunda gobernación, antes de la primera de Juan Schiaretti. La venta se hizo por licitación pública, de la que solo participó Eurnekián. Mediante ella se dispuso que el predio se vendiera, en ese entonces, a 107 millones de pesos. Unos 30 millones de dólares de ese entonces. Es decir, a razón de U$S 136/m2, cuando en la zona el valor de mercado superaba los U$S 1.000/m². Según la tasación firmada por el presidente de la Asociación de Peritos Judiciales Síndicos Concursales de la Provincia Jorge Gait, se demostró que el valor del Batallón 141 era exactamente de 337 millones de pesos. Es decir unos 112 millones de dólares.

El negocio se frenó por una ordenanza de Luis Juez, intendente de la capital en ese entonces, al declarar el terreno como Área de Reserva Verde. Ordenanza que duró hasta el verano del 2013 cuando el actual intendente Mestre aprobó el primer “Convenio Urbanístico” a favor del proyecto de Eurnekián, cambiando el uso de suelo, autorizando la inversión y recibiendo como contraprestación que la empresa construya para la ciudad una planta cloacal en el sur.

Al año siguiente, se aprobaría una nueva ley provincial de ambiente, que ordena que estos proyectos cuenten primero con la aprobación del estudio de impacto ambiental, luego de someterse a una audiencia pública con participación ciudadana. La primera convocatoria fue para el 19 de abril pasado, donde la única difusión que tuvo fue en dos diarios de corta llegada. Solo se inscribieron cinco personas. Debido al escándalo, el Ministerio de Ambiente tuvo que dar la orden a la Secretaría de Ambiente, quien organiza estos eventos, a realizar de nuevo la audiencia. Finalmente, el 14 de junio se hizo la convocatoria con 300 inscriptos.

Para el armado del Estudio Impacto Ambiental (EsIA), Corporación América recurrió a la consultora Ingeniería Laboral y Ambiente S.A., quien tuvo su pase allí Sergio Nirich, una de las figuras más polémicas de la política ambiental delasotista, quien empezó siendo el titular de la Agencia Córdoba Ambiente y luego como asesor del ministro Fabián López.

El Estudio aseguraba que el 52% de la superficie iba a ser “área de dominio público con espacios verdes, conservando la calidad ambiental del sector”. Sin embargo, esos 52%, se fraccionarían en calles y establecimientos que brinden servicios (22%), espacio privado de uso público (15%) y un parque municipal (15,95%).

A su vez, en el futuro Distrito, los 3,2 millones de efluentes diarios de desechos, provenientes a 6.500 inodoros, no se destinarán a la nueva planta que, hasta el día de hoy, Eurnekián no ha empezado a construir. Sino que irán a la tradicional planta de Bajo Grande, la misma que está tirando desechos sin tratar al Río Suquía.

Además, el EsIA reconoce que el cemento generará una severa impermeabilización: “Esto genera un impacto sobre la capacidad de infiltración de los suelos, dado que se produce un aumento de escorrentía superficial que durante la estación estival podrá generar anegamientos dentro del complejo edilicio”, problemática que es un recurrente en los barrios aledaños.

“El predio del ex Batallón 141 constituye uno de los últimos grandes espacios no construidos de dominio provincial en la zona céntrica de Córdoba, con condiciones naturales y patrimoniales que ameritan sobradamente su conservación”, indicaba un documento firmado por científicos de la Universidad Nacional de Córdoba. Entre ellas, Sandra Díaz, reconocida académica del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, que recibió el Premio Nobel de la Paz.

A pesar de todos los cuestionamientos que expusieron los vecinos en la audiencia pública, la Secretaría de Ambiente le aprobó el Estudio. No sin antes de que su secretario, Javier Britch, lanzara la polémica Resolución 77/2016, firmada el 05 de abril de 2016, que habilita a la Comisión Técnica Interdisciplinaria (CTI) crear un “informe preliminar” a cada proyecto en tratamiento antes de la audiencia pública, para después armar un informe técnico definitivo, y de ahí la última palabra del secretario. Dos días después, el 07 de abril, la CTI había armado su primer “Informe Preliminar”: la del EsIA del Distrito Las Artes. O sea que la inversión más importante de la capital cordobesa, solo les llevó en analizarla menos dos jornadas de trabajo.

Cuando desde los portales de ECOS Córdoba y Sala de Prensa Ambiental se expuso la existencia de esta resolución, tipificando un informe preliminar que no existe en la ley provincial de ambiente, el propio Britch se defendió en Radio Nacional Córdoba al asegurar que la resolución “ayuda a que los resultados de la Audiencia Pública puedan ser tenidos en cuenta en el momento de tomar una decisión dentro del Dictamen Técnico”. Algo que no lo habilita la Ley, ya que el secretario toma su decisión final mediante el aporte por separado entre la participación ciudadana y la opinión técnica de la CTI. No que las audiencias “ayuden” a los técnicos de la CTI. Incluso en su Artículo 29, se establece que es el Secretario de Ambiente el que valora y responde opiniones y no la CTI. Jaiver Britch expuso su defensa a la radio, pero le había pedido no discutirlo al aire con los periodistas de ECOS Córdoba y Sala de Prensa Ambiental.

Desde el personal de la Secretaría, le comentaron al presente cronista que la Resolución 77 permite agilizar los trámites, rechazando todo estudio antes de realizar su audiencia. Curiosamente, esa resolución no evitó el llamamiento a dos audiencias públicas sobre proyectos mineros en la zona de Los Gigantes de este año, donde el propio secretario tuvo que cancelarlos por amparos y notificaciones. Quizás el más evidente haya sido el proyecto Nácar, que pretende hacerlo sobre una reserva hídrica y con un escueto estudio de 24 páginas y fechado hace una década.

Y para cerrar, la venta del Ex – Batallón 141 en 2007 se hizo en el mismo año en que una de las filiales de Corporación América, Helport S.A., se quedó con la concesión de obras del Camino del Cuadrado, en el tramo donde se desmorona cada vez que llueve, junto con la constructora Britos SRL, que a partir de la entrada en su directorio de ex funcionarios delasotistas, se convirtió en Sociedad Anónima y se quedó con grandes obras públicas, bajo el mando de Horacio Miró, sindicado de ser el testaferro de De la Sota.

Un negocio completo bancado por delasotistas y radicales que, en el mismo día de la marcha por los bosques, dieron su primera pala, para una ciudad desbordada de inundaciones, colapsos cloacales y pérdida de sus espacios verdes.

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