Dos gravísimos hechos contra la libertad de expresión
tuvieron lugar en los últimos días en la provincia de Santa Fe.
En la capital de la provincia, tres periodistas
de la revista Tercer Mundo, Pablo Benito, Luis Moro y Claudia Moreno, fueron
detenidos el 31 de diciembre en una inusual maniobra combinada entre Daniel
Vidal, empresario de transporte de la ciudad de Santa Fe, el Juez de instrucción
de la ciudad capital Rubén Saurín, el secretario de seguridad provincial Alejandro
Rossi y las tropas de operaciones especiales de la policía provincial. El secretario
de seguridad Rossi y el empresario Vidal habían sido denunciados en una investigación
sobre la mafia del transporte publicada en la última edición de la revista Tercer
Mundo. Bajo la acusación de una supuesta extorsión al empresario Vidal, los
periodistas Benito y Moro estuvieron seis días detenidos.
En Rosario, por segunda vez en un mes el grupo Manzano-Vila
utilizó al periódico La Capital para difamar públicamente al dirigente gremial
de prensa Edgardo Carmona. Además, le iniciaron acciones judiciales y lo amenazaron
con desafuero y despido con causa. El texto publicado a página completa en La
Capital y firmado por Daniel Vila, ataca a Carmona a raíz de las declaraciones
de éste con relación al conflicto de los trabajadores de prensa del otro periódico
rosarino, El Ciudadano, que recientemente entró en quiebra. El Sindicato de
Prensa de Rosario denuncia que estos agravios responden a una estrategia patronal
que apunta contra todos los trabajadores de prensa.
Numerosas organizaciones sociales, gremiales, de derechos
humanos, medios alternativos y otras, suscriben una declaración de solidaridad
con los compañeros que están sufriendo la agresión, persecución y difamación.
Como allí se afirma "bien se sabe que con teléfonos intervenidos, persecuciones,
filmaciones y operaciones de inteligencia, no habrá informantes ni investigación,
ni verdad para los ciudadanos, y ciertamente habrá impunidad para el poder sea
oficial, empresarial o sindical."