El tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de Quilmes, condenó a la cabo primera Jorgelina Oviedo a reclusión perpetua por el delito de “tortura seguida de muerte”. Sin embargo, la policía cumplirá su condena en su domicilio. En el mismo fallo, los jueces absolvieron al oficial principal David Leonardo Gutiérrez, al suboficial principal Carlos Daniel Maidana, el agente Oscar Luciano Farías y el ex oficial subinspector Diego Hernán Herrera.

El 10 de mayo de 2002, Andrea junto con su esposo viajaban en el colectivo de la línea Nº 324. Andrea se sintió mal y se bajaron del colectivo para que se reponga. Andrea y Gustavo fueron rodeados por patrulleros y detenidos por “averiguación de antecedentes”. La acusación, sin prueba alguna, fue la de robar una carnicería a mano armada. Fueron golpeados y subidos al patrullero que los llevó hasta la comisaría 1° de Florencio Varela. Andrea y Gustavo fueron separados y torturados sistemáticamente durante toda la noche. La cabo primero Marta Jorgelina Oviedo se encargó personalmente, entre otros hombres y mujeres policías, de Andrea. Los gritos de dolor de Andrea hicieron que los demás detenidos suplicaran por la finalización de los tormentos. Luego de varias horas de torturas Andrea fue traslada al hospital Mi Pueblo, con una descompensación cardíaca. Doce días después fallecía luego de estar en coma e internada en terapia intensiva.