Este
sábado comenzaron los bombardeos sobre el territorio libio por parte de las
potencias occidentales Estados Unidos, Francia e Inglaterra -a las que
se sumaron luego otros países- amparados en la resolución 1973 de la
ONU, dictada por el Consejo de Seguridad, que habla de garantizar una zona de
exclusión aérea para impedir que el gobernante Muamar Gadafi, en el poder
desde 1969, pueda realizar ataques desde el aire. Los bombardeos han asesinado
un número indeterminado de ciudadanos libios -esos que había que
proteger-, destruido edificios, hospitales, el aeropuerto de Sirte, al este
de Trípoli, y parte de la residencia de Gadafi.
Además: FUKUSHIMA: UN CHERNOBIL A CÁMARA LENTA / ¿QUIÉN LE TEME A LUCÍA MORETT?
Más información en Sección Internacionales