La periodista mantiene desde el 27 de agosto pasado una huelga de hambre. Son 19 días sin ingerir alimento sólido como forma de reclamo del puesto de trabajo como conductora de una sección de noticias en la televisón pública, puesto que perdió en el 2006 por presión política de funcionarios del gobierno nacional.
"En reclamo de un espacio libre en el que todos podamos hablar sin condicionamientos de parte del poder ni político o económico, siempre tan entrelazado, al que estamos sometidos todos los periodistas y comunicadores que estamos en los medios en general, ¿no?, como la palabra atrapada."

"La palabra no debe ser negociada, la palabra no debe comprarse ni venderse. La palabra debe acercarnos a la verdad a todos, para eso estamos los comunicadores y los periodistas ... no estamos todos divirtiéndonos como pelotudos mientras nos están garcando."

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