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Movilización en Villa Constitución: bronca y dolor por la muerte de dos obreros de Acindar
Por Indymedia Rosario -
Friday, Feb. 15, 2008 at 7:58 PM
rosario@indymedia.org
El martes 12 de febrero a la mañana miles de obreros metalúrgicos marcharon desde la planta de la empresa siderúrgica Acindar al centro de Villa Constitución, en repudio por las muertes de dos obreros sucedidas el sábado luego de una agonía de cuatro días, exigiendo justicia y mayores medidas de seguridad laboral.
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Video informe: Protesta por
la muerte de 2 obreros en Acindar
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Los obreros Nicolás Correa y Alfredo Dianda no pertenecían a la planta permanente de Acindar. Eran trabajadores contratados por la empresa Serscay, y por ello, eran llevados a realizar tareas riesgosas que los empleados de planta permanente se negaban a hacer, mediante amenazas de despido o el pago de adicionales. El martes 5 de febrero ingresaron a un horno eléctrico a cambiarle los ladrillos refractarios, tan solo cuatro horas después de haber sido usado, cuando por normas de seguridad el lapso mínimo indicado es de 24 horas.
Eran las 11 de la mañana cuando se produjo el accidente al estallar un conducto refrigerante del horno, dejando ocho heridos graves. Con quemaduras en el 75 % del cuerpo, Correa y Dianda fueron trasladados a Rosario para su internación, donde fallecieron el sábado. Tenían 22 y 23 años.
A partir de ese momento, los trabajadores de Acindar, tanto de planta permanente como los contratados, realizaron medidas de lucha y el martes por la mañana se produjo una masiva movilización donde recibieron el apoyo de otros trabajadores y de los comerciantes de la ciudad, que bajaron las persianas cuando la gran columna llegó al centro. Los principales reclamos fueron justicia para los responsables, mejores condiciones laborales y la formación de comisiones mixtas de higiene y seguridad con participación obrera.
Para los trabajadores de Acindar, lo ocurrido marca un punto de inflexión. Hemos llegado a un punto de quiebre definitivo, evalúo un delegado de la contratista Paraná Metal. Esto es un llamado de atención, una bisagra en la ciudad de Villa Constitución, consideró por su parte otro obrero metalúrgico, ex empleado de Acindar.
Venimos a decirle basta a la patronal de los atropellos, basta de las injusticias, basta de que los compañeros trabajen en condiciones que los llevan a perder la vida, declaró por su parte Alberto Piccinini, secretario adjunto de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Villa Constitución, en tanto que Victorio Paulón, secretario general, llamó a los trabajadores de planta a parar ante cualquier nueva extorsión sobre un trabajador de empresa contratista con el objetivo de obligarlo a realizar tareas riesgosas.
En los discursos pareció escucharse una autocrítica por parte de la dirigencia gremial, a la vez que reclamaron más participación.
Acindar es la principal productora de aceros no planos de Argentina y tiene una capacidad de producción de 1.350.000 toneladas de acero por año.
Pocos días antes del accidente, el 2 de febrero, la corporación trasnacional Arcelor Mittal, la principal productora de acero del mundo, había concluído el proceso de adquisición de Acindar al invertir 542 millones de dólares para aumentar su participación desde el 64,5 - que poseía desde un año atrás - hasta el 99,5 por ciento de su capital. Ese mismo día, ArcelorMittal también compró tres minas de carbón en Rusia por 720 millones de dólares a la siderurgia OAO Severstal.
Un día después de la movilización, el 13 de febrero, la gigantesca corporación anunció ganancias record a nivel global con un EBITDA (índice de rentabilidad) de 19,4 miles de millones de dólares, un 27 % más que el año anterior.
Reflejaban dolor y bronca los rostros serios de los miles de obreros metalúrgicos que marcharon en Villa Constitución. Uno de ellos, delegado de la empresa contratista Paraná Metal, lo expresó así. Lamentablemente nos encontramos nuevamente reunidos por haber despedido a dos compañeros, pero como se ve estamos nuevamente juntos para luchar para conseguir las reivindicaciones de nuestros puestos de trabajo, por seguridad, para tener buenas condiciones para todos nuestros compañeros y que esto no vuelva a pasar.
Creo que hemos llegado a un punto de quiebre definitivo donde hay que tomar firmemente la decisión de conseguir las condiciones necesarias para que esto no vuelva a pasar. No estamos dispuestos a llevar a ningún compañero más al cementerio. Simplemente eso concluyó.
Sobre el escenario ubicado en la Plaza San Martín, uno de los compañeros de trabajo de Correa y Dianda, obrero y delegado de la contratista Serscay, pidió justicia.
Hay muchos responsables y tienen que caer. Y nosotros sabemos quiénes son. Los responsables son los que le meten presión a la gente. Son los que adornan con dinero para que uno se meta a poner el cuero y pierda la vida como perdieron estos compañeros. Estas muertes que ocurrieron, ellos las tienen que pagar. Porque lo que hicieron, no fue un accidente, realmente fue un asesinato.
Lo único que quiero es, esa gente que está ahí tanto como los jefes de seguridad y la otra demás gente que le importa nada más que la producción, que se vayan. Y los que tienen que pagar que no paguen yéndose con una indemnización millonaria, que paguen realmente con lo que tienen que pagar, si tienen que ir presos que vayan presos, pero que paguen. Porque nosotros no vamos a volver a poner el cuero para que ellos se lleven la plata a costillas nuestras para que sigan perdiendo vidas los que no la tienen que perder.
Luego de concluído el acto, Indymedia Rosario dialogó con obreros que relataron cómo se trabaja al interior de la fábrica. Tato González, ex empleado de Acindar, contó: conozco profundamente, dado que el accidente se produjo en el que era mi puesto de trabajo. Yo trabajaba ahí, en el horno 4 y conozco a la perfección... casualmente, estaba hablando ahí con otro compañero con el que trabajábamos en el mismo lugar.
Y bueno, la situación ha sido histórica en cuanto a que la empresa quiere que entremos en cuanto se apaga el horno. El horno se apaga después del último sangrado a 1700 grados y que en cuatro horas nosotros calculamos que no ha tenido menos de 700, 800 grados. Y que realmente pusieron a trabajar a estos chicos en una plataforma que realmente es una bomba de hidrógeno, cualquier falla en el enfriamiento iba a producir lo que se produjo.
El obrero aseguró que en los últimos cinco años, esto era una práctica usual en la empresa y creemos que hay distintas responsabilidades. Hay que ver cómo de alguna manera la empresa tratando de buscar mayor ganancia, a través de la mayor explotación de los trabajadores... y entre ellos hay mucha zanahoria, porque a estos chicos les pagaban más por entrar más rápido al horno... y bueno, les costó la vida.
El trabajador recuerda que nosotros en otra época no permitíamos el ingreso en menos de 24 y a veces, hasta 48 horas. Y aún así, nosotros tomábamos la temperatura y si había más de 200 grados no entraba ningún compañero al horno.
Sobre las responsabilidades, González apunta a la responsabilidad de la empresa, la responsabilidad de la empresa contratista... y creo de mi parte y con todo respeto, que ha habido un relajamiento por parte de la organización gremial por no tener más cuidado y más en claro que la seguridad no llegara al extremo que ha llegado.
En los discursos de los máximos dirigentes de la UOM Villa Constitución pareció escucharse una autocrítica por parte de la dirigencia gremial, a la vez que reclamaron más participación. Alberto Piccinini, histórico gremialista que actualmente se desempeña como secretario adjunto de la UOM Villa Constitución, afirmó que tenemos que decirle basta de atropellos, basta de tareas que corren riesgos los compañeros, y si hay que esperar las horas necesarias para que un horno funcione, hay que esperarlo y hay que cumplir con las reglas de seguridad. Esto no es casualidad. Esto es el ansia de tener más producción y a veces incentivan a los compañeros para que acepten, y después les cuesta la vida. Entonces nosotros tenemos una responsabilidad, somos el sindicato y no tenemos que permitir más que estos atropellos se sigan cometiendo en la fábrica.
Consultado respecto a las autocríticas expresadas en su discurso, el gremialista respondió que está claro. Estamos dispuestos a hacer lo que nos diga la gente y cumplir con el rol del sindicato. Y corregir los defectos que haya. Repasar, no pensar que no tenemos errores. Tenemos errores y tenemos que corregirlos. Tenemos que defender la vida de los compañeros, bueno, para eso necesitamos la participación de la gente.
Frente al dolor por la muerte de los dos trabajadores, Piccinini no quiso dejar de recordar que la historia se repite, que en los años 70 nos acusaron de subversivos y nos metieron presos, en los años 70 mataron como 20 compañeros acá en Villa Constitución, y eso es el sistema capitalista de explotación, que quiere pagarle salarios de miseria mientras las empresas tienen ganancias fabulosas. Entonces esto no es nuevo. El dolor de estos compañeros se siente. Pero la represión viene de mucho tiempo. (...) Vino la dictadura militar y luego recuperamos en parte la democracia. Pero todavía falta democracia. En la distribución de los recursos, en cómo se reparte la torta, en lo que gana un trabajador que arriesga la vida como estos compañeros y en lo que gana la empresa.
Desde la UOM Villa Constitución se hicieron públicos los puntos a discutir con la empresa siderúrgica:
- Comisión mixta de higiene y seguridad, esa conformación la vamos a plantear que también esté integrada por compañeros contratistas junto con compañeros propios,
- revisión de los métodos de trabajo y organización de los mismos,
- tiempos de los procesos productivos,
- revisión del mapa de riesgos de Acindar S.A.,
- revisión de los procedimientos para su cumplimiento,
- planteles mínimos en función de un proceso productivo seguro,
- delineación de inversiones necesarias con el objetivo de tener métodos de producción seguros,
- revisión de las órdenes de trabajo; programación de los mismos y su coordinación,
- garantizar la entrega de todos los elementos de seguridad fundamentalmente en empresa contratista,
- sistema de contratación,
- pase a planta de los puestos permanente,
- planteo de igual tarea, igual remuneración,
- encuadramiento de UOCRA cero dentro de Acindar, porque es una verguenza que hay compañeros que también trabajan haciendo tareas metalúrgicas y Acindar no les quiere reconocer el encuadramiento.
Como consecuencia del grave accidente sufrido en Acindar, el 15 de febrero el gobierno de la provincia de Santa Fe envió a la legislatura un proyecto de ley que propone la creación de comités de salud y seguridad en todas las empresas con 50 o más empleados -privadas o públicas, con o sin fines de lucro-, con participación de trabajadores y empleadores.
Según el proyecto, serán órganos paritarios destinados al control y la consulta regular y periódica de las actuaciones de la empresa en materia de prevención de riesgos.
Los comités de salud y seguridad deberían estar conformados por igual número de representantes del empleador y delegados trabajadores, y las designaciones deberán recaer en varones y mujeres en proporción a su número en el establecimiento.
Con el objetivo de tratar fundamentalmente dos puntos, el salario y la prevención de accidentes, se anunció para el día 29 de febrero un Congreso de Delegados gremiales del Cordón industrial, a desarrollarse en la sede de la UOM Villa Constitución. A ese congreso se encuentran convocando la propia UOM de Villa junto a las seccionales afines de la UOM San Nicolás, Campana y La Matanza, y la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), y se espera que cuente con la participación del ministro de Trabajo de la provincia de Santa Fe, Carlos Rodríguez.
