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Marcha de la bronca, grito de justicia
Por Indymedia Rosario - Friday, Oct. 20, 2017 at 12:36 PM
rosario@indymedia.org

Este jueves cientos de personas se sumaron a la ronda de las Madres de Plaza 25 de Mayo de Rosario, en el marco de la conmoción general por la aparición de un cuerpo en el Río Chubut. La presunción que podría tratarse de Santiago Maldonado, sublevó a amplios sectores sociales que entre idas y vueltas por la prudencia solicitada por la familia del joven, finalmente se movilizaron en distintos puntos del país. Fuerte repudio al manejo mediático y oficial del hallazgo y la denunciada encuesta telefónica que busca testear la opinión pública sobre el caso.

Marcha de la bronca,...
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La noticia de la aparición de un cuerpo flotando en un sitio tres veces rastrillado, generó tristeza, conmoción y muchísima indignación. Sentimientos enardecidos con las declaraciones de Elisa Carrió, que primero arriesgó que había “un 20% de posibilidades de que Maldonado esté en Chile” y después se animó a comparar el potencial congelamiento del cuerpo en el río sureño con el invernado Walt Disney. Dos expresiones que incluso molestaron a quienes la seguían considerando un estandarte del republicanismo.

Santiago Maldonado tiene 28 años, según cuentan sus allegados es de espíritu viajero y solidario y fue víctima de desaparición forzada el 1° de agosto en Pu Lof Cushamen, Chubut, durante un operativo de la Gendarmería Nacional comandado por el Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Nación, Pablo Noceti. Es hermano de Sergio, quien junto a su compañera permaneció el martes ocho horas sentado al lado de un cuerpo que no sabe aún si es de él porque según indicó en conferencia de prensa, no confía “en nadie”.

Recordar estos puntos y rehumanizar la figura de Maldonado parece una tarea esencial en medio de una fenomenal operación político mediática que primero quiso catalogarlo de terrorista (como si, además, se avalaran las desapariciones y torturas en ese marco) y ahora quiere transformarlo en un cuerpo con determinado nivel de descomposición, que debe hablar, que debe decir durante pericias morbosamente detalladas en la radio y la tv.

Pese a que no fue en esta ocasión la familia Maldonado– en estos momentos abocada a controlar que no haya más desmanejos y encubrimientos para de una vez obtener verdad y justicia- la que llamó a marchar, gran número de organizaciones definieron concentrarse. “Este hallazgo nos moviliza con una mezcla de tristeza, dolor y mucha bronca, porque toda la situación de la escena hace suponer que es un cuerpo plantado. Es río arriba, la altura del río en el momento que desapareció Santiago en ese lugar no superaba los 30 centímetros. Ese cadáver fue puesto y la pregunta por qué y quién y si esto busca desencadenar una interna en cierto espacio del poder o si es estigmatizar a la comunidad de la Pu Lof Cushamen”, analizó la Presidenta de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Rosario, Claudia Gotta.

Alejandro Jones Huala, tío del líder mapuche detenido, manifestó sentir “bronca, incertidumbre, como toda la familia de Santiago, ellos están doloridos y nosotros también. Estamos fortalecidos, aunque nunca debería haber pasado esto, hay que generar conciencia antes para que no suceda más. Hacemos un llamado a la sociedad para que sea más consciente sobre la lucha de todos los pueblos, que es digna”.

Cómplice liviandad

Si bien no hubo discursos y en las conversaciones diversas que se multiplicaban en la plaza había más dudas que certezas y necesidad de encontrarse para generar esa sinergia colectiva que empuja a seguir adelante, ciertos ejes de análisis en perspectiva se reiteraban. Primero, que el respeto a la definición de la familia no invalidaba la necesidad de diversos sectores de abrazarla y abrazarse en esta coyuntura. “No podemos quedarnos en nuestras casas sin manifestarnos ante esta situación de perversidad de no valorar la vida y frenar reivindicaciones el campo popular de parte de este gobierno”, expresó Gotta.

Por otro lado, el trasfondo del caso, ligado a la existencia de presos y presas políticas como Jones Huala, Salas y Santillán entre muchos otros y otras; a la disputa por la prórroga de la Ley 26.160 que protege las tierras de los pueblos originarios y vence este 23  de noviembre; y la indiscriminada extranjerización de territorios nacionales pasados a manos de multinacionales como Benetton.

Sobre el tema de la desaparición forzada, hoy muy atravesada por el debate electoral, lo que falta es consolidar el debate sobre el desmantelamiento del aparato represivo del Estado. Porque no toda la camada actual de gendarmes fue formada en la escuela macrista, que sin duda sí ha hecho de la represión un modus operandi para garantizar la aplicación de sus políticas cuando la población presenta resistencia.

En este complejo entramado los medios hegemónicos han faltado una vez más al derecho humano a la información. Con un puñado de periodistas que ocupan los horarios centrales como vehementes defensores de la desinformación y la carne podrida; muchos otros que pese a su sensibilidad social no mostraron estar a la altura de las últimas novedades; y otro puñado con una claridad política no electoralera, la realidad es que lo visto y escuchado esta semana merece una reflexión. Sobre todo ante esta encuesta telefónica denunciada por un legislador provincial que intentaba generar estadísticas sobre el impacto electoral del hallazgo del cuerpo.

La ciudadanía debe replantearse frente a la encuesta y al papel amarillista y tan poco serios de los medios que yo llamo de desinformación masiva, poner en escena que hay que buscar otras construcciones. Debe plantearse qué tipo de medios de comunicación se merece, porque no solo subestiman nuestra inteligencia sino que atentan contra un derecho como el que es el derecho a la comunicación. Hay una liviandad en el trato que hace mucho mal”, analizó la referente de APDH.

La proliferación de analistas forenses, que llenaron de datos sobre putrefacción cadavérica la mayor parte de la programación mediática –de diversas orientaciones políticas- también merece su reflexión, dado que el joven desaparecido es ahora un cuerpo que debe hablar. “Hay una objetivación de una persona, que se solidarizó con una lucha y sufrió un castigo ejemplar. Eso pasa a ser objetivado, se habla de la autopsia, del congelamiento. Ni que hablar que repudio las declaraciones livianas y perversas de una figura como Carrió que debería tener un llamamiento del poder judicial concreto. Esa es otra deuda, la de la desconfianza masiva frente a ese poder que debería ser garantía aún en esta democracia burguesa”, expresó Claudia.

No olvidar

La desaparición de Maldonado expuso con crudeza no sólo la solidez de los sectores dentro del Estado que replican el bagaje ideológico y técnico desplegado durante la dictadura genocida, sino la dificultad nunca azarosa de dimensionar el intrincado vínculo entre los empresarios poderosos en territorios, las fuerzas represivas oficiales y paraoficiales y el poder judicial y político. Jones Huala destacó que sólo la comunidad cuenta “50 hermanos mapuches desaparecidos”. Aunque consideran a Santiago como “un guerrero más de nuestro pueblo, consciente de nuestra lucha”, lamentó que la sociedad haya tenido que ver un joven blanco oriundo de Buenos Aires para acusar recibo de la gravedad de estos hechos y movilizarse.

Lejos de cualquier recelo en torno a lo originario – criollo, el planteo gravita en torno a que, sea quien sea la víctima y tenga la difusión pública que tenga su caso, las desapariciones forzadas atentan contra el funcionamiento institucional en democracia en su conjunto. Algo que sucede también con los casos de femicidios y mujeres desaparecidas según su lugar de origen, qué casos toman relevancia pública y cuáles no. En nuestra provincia la desaparición de Rosalía Jara en Fortín Olmos, Departamento Vera, no  ha tenido el mismo tratamiento que otros y eso lejos de sacarles peso a las demás víctimas, debería ayudar a redimensionar la gravedad social de estas realidades.

A nosotros ya nos sacaron el miedo. Quieren sembrarlo para que abandonemos la lucha. Que el gobierno y los empresarios sepan que nuestra lucha continúa. No nos van a debilitar, esto nos fortalece como pueblo y vamos a honrar la memoria de Santiago. Pedimos  justicia para que su lucha y vida no haya sido en vano. Nosotros no lo vamos a olvidar, esperamos que la sociedad cuando pase un tiempo tampoco lo haga”, expresó con voz calma y mirada conmovida Alejandro Jones Huala.

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