Por Prensa De Frente
El Registro Único de Beneficiarios, RUB, es de los tantos programas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires sostenido casi exclusivamente por trabajadores contratados bajo el régimen de locación de servicio. A pesar de la precariedad y vulnerabilidad que implica este tipo de contratación, más de 60 trabajadores iniciaron desde el año pasado un proceso de organización y sindicalización en reclamo de mejores condiciones de trabajo. Hace mas de
un mes luego de una huelga realizada por los trabajadores en reclamo de mejoras salariales, la dirección (que depende directamente de Raúl Fernández, Jefe de Gabinete) echó a dos trabajadores, cerró el diálogo y demoró el pago de los sueldos.
La directora general,
Sandra Castillo, es
actualmente la cuarta
candidata a legisladora de la Ciudad de Buenos Aires por el Partido Socialista. A principio de año ante las elecciones internas despidió a los candidatos a delegados y ahora se resiste a dialogar a los trabajadores impugnándoles la representación gremial, desconociendo la relación de dependencia (aún cuando el propio GCBA a través del
Decreto Nº 948/05 ya lo asume). En cambio prefiere la persecución sindical a través de despidos injustijicados y la intimidación. Ha llegado incluso a obligar a trabajar bajo llave en la oficina.
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