La Cámara Federal de Rosario ratificó que las violaciones sexuales
en centros clandestinos son delitos de lesa humanidad y parte del
plan criminal de la dictadura. Lo resolvió en un acuerdo plenario
que confirmó el procesamiento de dos imputados por el martirio de
Silvia Suppo, en mayo de 1977, cuando fue secuestrada a los 18 años,
violada por tres represores en "La Casita", un chupadero en las
afueras de Santa Fe donde operaba el Ejército y obligada a abortar
dos meses después. Se trata de un teniente coronel, Jorge Roberto
Diab (ex subjefe del Destacamento de Inteligencia Militar 122) y
de un comisario, Ricardo Silvio Ramón Ferreyra (ex jefe de la comisaría
4), a quienes la Cámara consideró "partícipes necesarios" del delito
de "violación sexual agravada en grado reiterado (tres hechos)".
Silvia murió asesinada en marzo de 2010, tres meses después de declarar
en el juicio que condenó a 21 años de prisión al ex juez federal
Victor Brusa y a su grupo de tareas.
Ratifican
que las violaciones fueron parte del plan sistemático de la dictadura
Por Juan Carlos Tizziani - Rosario/12
|