Prensa de Frente en Río Cuarto
Dos marchas convocadas de boca en boca y a través de los medios lograron que el pintor de brocha gorda, detenido por el crimen de Nora Dalmasso de Macarrón, salga de prisión y que renuncie del Fiscal General de la provincia. Ante la novedad de que los investigadores consideraban al joven Gastón Zárate como sospechoso de haber robado dos celulares, violado y estrangulado a la empresaria, la bronca se extendió a una velocidad impensable entre los habitantes de Río Cuarto. Cuando se supo que Zárate se entregaría a la policía, ya en las calles se empezó a correr la voz. “Agarraron a un perejil”, fue el comentario obligado. Los abusos policiales, la impunidad de los hombres de poder y las farsas judiciales se hicieron intolerables para muchos riocuartenses que salieron a las calles.

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