El 11 de mayo un guardia de seguridad atacó a 6 niños tobas dentro de la tienda comercial. Tres de ellos fueron rociados con gas pimienta, salieron disparados hacia la calle con los ojos tapados con sus manos por la gran irritación y de milagro no fueron atropellados por un colectivo que pasaba por el lugar. En repudio a este hecho más de 200 personas hicieron este martes un acto de desagrabio frente al negocio de la multinacional. “No puede dormir a la noche, tiene miedo, cierra los ojos y ve al hombre que la agredió”, contó Gidela, la mamá de María de los Angeles, una de las niñas heridas. El guardia es Miguel Angel Buljubasich, quien estuvo prófugo varios días hasta que el 17 de mayo se presentó a la Justicia. El gerente general de Falabella Argentina dijo repudiar lo sucedido y se despegó del accionar del agente de seguridad.
Además: JUSTICIA SALTEÑA ANULA ADJUDICACIONES EN TERRITORIO INDIGENA / RADIOGRAFIA A LA COMPAÑIA DE TIERRAS DE LA MULTINACIONAL BENETTON EN ARGENTINA
Ver en Sección Pueblos Originarios