La lucha contra el “Plan de Rodrigo- Isabelita” y por la homologación de los aumentos salariales obtenidos en las paritarias fue una de las movilizaciones obreras como quizá nunca haya vivido la Argentina y que dejó a la burocracia sindical sin sostén y viéndose obligada a llamar dos veces al Paro General el 27 de junio y el 7-8 de julio de 1975. Fueron quince días en que el país estuvo prácticamente paralizado, con masivas y permanentes marchas obreras en todo el territorio nacional. Se fue dando un espacio donde surgieron las Coordinadoras, formas organizativas de la clase obrera, sustentadas en la acción conjunta, la solidaridad, la democracia de base y la defensa de sus intereses. Por Leónidas Ceruti
Más información en Indymedia Trabajadores