Otra vez el Estado vuelve a definir quiénes son las comunidades indígenas amigas y cuáles las enemigas. Y a partir de esa línea discursiva demarcatoria se definen acciones. Los beneficios para la construcción de una radio o una salvaje y brutal represión. El mismo Estado, como un monstruo de dos cabezas.
Decir “traidor” es decir “disparen” Más información en Indymedia Pueblos Originarios |