“La isla El Silencio fue donde el grupo de tareas 3.3.2, que funcionaba en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) le compra en una operación fraudulenta, obviamente, a la Iglesia Católica y donde estuvimos secuestrados durante el período en que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) estuvo nuestro país, en septiembre de 1979”, explicó Enrique Cachito Fukman, otro de los sobrevivientes. La dictadura había tenido que ceder ante las presiones generadas por las denuncias internacionales. Debió aceptar que la CIDH visitara el país para tomar testimonios de familiares de los desaparecidos. También pasarían por la ESMA, por eso, la Armada decidió conseguir un terreno alejado de la ciudad, en las cercanías del Río Paraná Miní, parte del delta del Paraná. Compartimos la crónica de La Retaguardia. Además: CONTRA LA IMPUNIDAD Y EL ENCUBRIMIENTO EN LA CAUSA AMIA / ORGANIZACIONES POPULARES RECHAZAN LA CONVOCATORIA AL 18F Más información en Indymedia Derechos Humanos |