La militante originaria hondureña de la etnica Lenca, Berta Cáceres, fue asesinada
en la madrugada del jueves 3 de marzo, cuando desconocidos ingresaron al
interior de su vivienda. Berta era la coordinadora del Consejo de Pueblos
Indígenas de Honduras (Copinh) y líder de la comunidad indígena lenca y
movimientos campesinos, además de su labor como defensora de los derechos
humanos. La semana anterior, Berta ofreció una conferencia de prensa donde
denunciaba que cuatro dirigentes de su comunidad habían sido asesinados
y otros recibieron amenazas. En 2015 había sido galardonada con el
Premio Ambiental Goldman para el Sur y Centroamérica, por su contribución
a la lucha persistente en contra de la construcción de una represa hidroeléctrica
impulsada por el Banco Mundial, que amenazaba con desplazar a cientos de
indígenas de Honduras.
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