Esta madrugada comenzó un paro en la línea 60 -que continuará durante todo el día de mañana- tras el despido efectivo de un trabajador. Esta cesantía se da en el marco de otros 9 despidos y 20 suspensiones, luego de que el grupo gerenciador DOTA alegara “destrozos” tras el fallecimiento de David Ramallo, quien murió al ser aplastado por una unidad que se disponía a reparar. Los “destrozos” no fueron más que una puerta derribada pero sirvieron de excusa para atacar la organización sindical de la Línea 60. Más información en Indymedia Trabajadoras/es |