En febrero de 1974, durante el gobierno de Perón, en Córdoba tuvo lugar el “Navarrazo”: el jefe de la policía, Antonio Navarro, tomó la casa de gobierno y destituyó al gobernador, Obregón Cano y al Vice gobernador, Atilio López, que posteriormente sería asesinado por la Triple A. y la provincia fue intervenida.
La fuga del 24 de mayo de 1975, donde veintiséis presas políticas recobraron su libertad y se reincorporaron a la lucha, se produjo en momentos en que el designado interventor de Córdoba, Brigadier Lacabanne, presidía el Tedeum en el Teatro Rivera Indarte (hoy Libertador San Martín) y declaraba aniquilada en Córdoba a la "subversión". En la segunda parte de la entrevista, Cristina Salvarezza y María del Carmen Claro, dos de sus protagonistas, recuerdan esta fuga, de la que aun hoy existen muy pocos registros.
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