El derecho a la libre expresión es un derecho humano, que como tantos otros forman parte de esta democracia formal, pero no están garantizados por el Estado u otras instituciones. La comunicación, básica para toda relación humana, no se limita a los medios pero sí son estos actores importantes en los flujos e intercambios de información que pueden existir (o no) entre las distintas personas, organizaciones, asambleas, instituciones que constituyen la sociedad.
En Argentina, ante un panorama legal que avala y fomenta la concentración de medios en pocas manos empresarias y reduce las múltiples voces a unas pocas campanadas que suenan al unísono, desde hace mucho tiempo hemos aprendido que es necesario tener medios “propios”.
Alternativos, comunitarios, populares. Distintos proyectos han ido naciendo a lo largo de los años para crear junto a los actores y las actrices de la sociedad, codo a codo, una comunicación de igual a igual.
Con otros objetivos, creando otros sentidos, y constructores de una realidad distinta a la que forman los masivos medios empresariales. Hace 28 años que nada ha cambiado. Bajo una ley de 1980, sancionada bajo la última dictadura militar, que regula la actividad radial y de televisión sin contemplar radios o canales que no sean del estado o de empresas; y un decreto firmado por el ex Presidente Néstor Kirchner en el cierre de su mandato, manteniendo las licencias de medios congeladas por 10 años más, claramente no estamos frente a un marco legal que beneficie las propuestas de comunicación comunitarias y sin fines de lucro.
Sin embargo, existen y siguen naciendo medios de comunicación que prometen romper con la lógica tradicional de las empresas y el estado, y estrechar lazos junto a distintos sectores de la sociedad habitualmente despojados de voz y espacios públicos. Medios alternativos comprometidos con la creación y el ejercicio de una real vida en democracia.
Audio Informe sobre la Ley de radio difusión
Por Colectivo Indymedia Córdoba (((radio)))
Reproductor Flash: