Tal como se había planificado, la caravana recorrió las calles de las distintas secciones del pueblo de Malvinas Argentinas, para hacer sentir el descontento de la Asamblea de vecinxs con la reciente autorización del Tribunal Superior de Justicia de Córdoba para que se continúe con la construcción de la planta procesadora de semillas transgénicas de maíz de Monsanto.
El martes de esta semana, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) anuló la medida cautelar que prohibía a la multinacional continuar con las obras de instalación de la planta seleccionadora de granos en un predio de Malvinas Argentinas.
La marcha inició en la Plaza de las Madres, de la Primera Sección, para luego recorrer en auto, bicicleta o caminando toda la localidad hasta la vera de la Ruta A88. Leer artículo completo.